martes, 3 de septiembre de 2013

De lavadoras y personas

Cuando un empresario no vende suficientes lavadoras y tiene muchas en el almacén, lo que hace es bajar el precio, hasta que consigue venderlas todas. Si en vez de lavadoras lo llamamos personas, y en vez de precio lo llamamos salarios, la solución a la crisis pasaría por bajar el salario, hasta que las empresas estuvieran dispuestas a contratar a esos salarios (comprar personas como compran lavadoras, vamos). Ese es el razonamiento del señor Bill Gates para solucionar el problema de España (y de más de un ilustre premio Nobel, verdad señor Prescott?). El problema es que no somos lavadoras ni equisalcuadrados, y quedarnos "en el almacén" es pasarlas canutas. 

El problema es que sin salarios dignos a ver quien va a comprar la producción y va a generar demanda para animar a los emprendedores y estimular la economía (Ni Rita, leeros a Keynes y lo que dijo...en los años 30!!). El problema es que hay salarios y salarios, y me sé de unos que siempre ganan y suben. Primero crean la crisis, y luego como pago por su incompetencia se llevan bonus millonarios y predican la austeridad desde sillones de cuero. El problema es que el reparto ya está pactado. Que a mi no me dan créditos a un 1% y a la banca sí, que a mi no me dejan guardar el dinero a alguien con la promesa de devolverlo cuando me lo pida y a la vez prestárselo a otro sin su consentimiento. que los recortes empiezan por educación y sanidad (qué casualidad) y que no es lo mismo apretar el cinturón al que no va a sentir ni el roce que al que no le vas a dejar respirar. Austeridad con sentido...y estímulo!! Leyendo a algunos "expertos", me avergüenzo de haber estudiado economía.

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